La madrugada se despliega gris. Cielo y agua, río y charla. Los cuerpos nos dicen que es imposible la lejanía. Sin embargo, después de dos horas de lancha, las miradas, las bienvenidas nos dicen lo contrario.
El viento se lleva el gris. El día se va haciendo sol y voces. Los fueguitos de cada une van encendiendo las palabras. Aire, agua, tierra y fuego. Los cuatro elementos aparecen sin esfuerzo.
Hay escuelas en islas; hay infancias y hay maestres que pescan infancias y las anclan en tierra firme por un instante.
Entonces, cuando los niños-pez muerden el anzuelo, la invitación es irresistible: Laura Devetach, Juan Lima, Oche Califa, Lili Bodoc, Emily Dickinson nos sumergen en el quinto elemento. Porque, cómo todes sabemos, también estamos hechos de poesía.
Gabriela García / Taller “4 elementos “en EEE 504 de San Fernando
3 de setiembre 2025. @mujeres.que.dicen
Aventurarnos a la poesía es algo más o menos cotidiano, lo raro fue aventurarnos al río, a navegar, a sentarnos, mirar para afuera con ojos asombrados, compartir charlas con las maestras que día a día hacen ese viaje para llegar a sus puestos de trabajo, a sus escuelas.
Uno de los talleres que coordinamos fue el de “Poesía y Aromas” Participaron chicos y chicas de 2do ciclo de la EP 12 de San Fernando.
Preparamos en la hermosa Biblioteca de la escuela, los frascos envueltos en tela negra que contenían diferentes aromas: limón, pomelo, canela, ruda, café, cúrcuma, mentol, vainilla, comino, perfume de rosas. Les dijimos que se acercaran para oler los distintos aromas sin decir nada a los demás.
Inevitablemente las palabras salían, no se podía guardar el secreto ... Les preguntamos si pensaban que la poesía tenía algún olor… Sí-dijeron: a tinta, a nuevo, a letra, a quinta. Les leímos algunos poemas de Laura Devetach, Martín Broide, María Teresa Andruetto, Roberta Iannamico que sugerían olores. Luego
les invitamos a pensar y a compartir que olor de los frasquitos les había gustado o no; si les había hecho acordar a alguien, alguna situación o anécdota…pudimos intercambiar algunos oralmente y les pedimos que se animaran a escribirlos.
Algunas producciones:
Una tarde de verano comía naranja con mi hermano Cuando era pequeño, mis abuelos tomaban café temprano Cuando jugábamos a la mancha con mi amiga, íbamos a su casa y sentía olor a café.
Cuando yo vivía en la isla vivía comiendo naranjas y eran las naranjas más ricas del mundo mundial. Cuando voy a la casa de mi abuela tiene muchas naranjas y yo me hago jugo.
Yo cuando abrazaba a mi abuela se le sentía su perfume Casi en verano mi mamá traía mandarinas para comer con mis hermanos. El sabor era dulce muy ricas Poesía, aromas, infancias de la isla del Delta y nuestro corazón hecho una mañana de jazmines, aunque ya era la tarde y hubo que regresar.
Elizabeth Molver / EP 12 San Fernando. 3 de setiembre 2025. @mujeres.que.dicen
El taller se inicia con el retrato de Marc Chagall. Tomamos sus figura y pinturas en base a la propuesta del cuadernillo “Sanar el mundo”.
Vimos que el autor tenía un sombrero y jugamos con sombreros que llevamos. A ponerlos, a sacarlos, a pensar qué podríamos guardar allí, quién podría usar cada uno por sus formas, colores…Compartimos poemas de tradición oral, de María Cristina Ramos y María Laura Dedé con temática de sombreros.
En otro de los cuadros había una figura de una mujer volando, leímos poemas de viento, de: Mercedes Calvo, Nelvy Bustamante, María Elena Walsh y dramatizamos cómo nos haría volar el viento, según fuera fuerte, suave, arremolinado, etc.
Finalmente les mostramos el cuadro: “Yo y mi aldea” y la propuesta fue descubrir que cosas hay en su aldea, el lugar donde viven. Hicimos un collage con papeles de colores, dibujos, telas, figuras, al que llamamos: “Nosotros y la isla”.
Susana Zabala / Taller en Jardín 906 San Fernando
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